Europa reafirma apoyo militar a Ucrania y descarta levantar sanciones, mientras se planifican nuevas acciones ante posible inacción de EE.UU.
Internacional27 de marzo de 2025
Redacción
París, Francia. — La cumbre internacional liderada por Francia sobre el futuro de Ucrania concluyó este jueves con una posición clara: no es momento de levantar las sanciones contra Rusia. Varios líderes europeos denunciaron las tácticas dilatorias del Kremlin ante la propuesta de alto el fuego impulsada por Estados Unidos, y reafirmaron su compromiso con el apoyo militar a Kiev.
El presidente francés Emmanuel Macron declaró que, si bien no existe un consenso total sobre el envío de una fuerza de seguridad liderada por Europa a territorio ucraniano, esto no constituye un obstáculo para avanzar en su planificación. Detalló que las garantías futuras de seguridad propuestas por la “coalición de los dispuestos” incluyen apoyo adicional al ejército ucraniano, el posible despliegue de una fuerza de aseguramiento en zonas estratégicas alejadas del frente, y un esfuerzo coordinado para el rearme de los países participantes.
Macron subrayó que Europa debe estar lista para actuar incluso sin el respaldo estadounidense, aunque expresó esperanza en que Donald Trump reconsidere su postura si Moscú demuestra falta de voluntad para cumplir con sus propios compromisos.
Por su parte, el primer ministro británico Keir Starmer confirmó que jefes militares de Francia, Reino Unido y Alemania viajarán a Kyiv para colaborar en la planificación del futuro del ejército ucraniano. Además, se convocará una nueva reunión del grupo de contacto para la defensa de Ucrania, con el objetivo de movilizar más ayuda militar y asegurar que el país se mantenga en la lucha.
Starmer también criticó duramente al Kremlin por “jugar a ganar tiempo”, exigiendo avances “en días y semanas, no en meses”.
El cierre de la cumbre no logró la unanimidad buscada, pero consolidó un bloque europeo determinado a avanzar en la protección de Ucrania, enviando una señal firme de que las decisiones no dependerán del visto bueno ruso ni de la reticencia de terceros actores.
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