
No basta con una visión centrada en el uso humano. Hoy, muchos ecosistemas acuáticos –ríos, humedales, lagos– sufren por la falta de agua, a menudo debido a que se priorizan las demandas humanas.
Debemos preguntarnos también en qué medida las narrativas climáticas forjan el producto mismo de la narrativa, es decir, en qué medida y de qué forma la producción discursiva del capitalismo verde o del decrecimiento reflejan luchas de poder características de las sociedades del capitalismo global.
En una noche que ya figura entre las más tensas y decisivas de la historia reciente del Oriente Medio, Estados Unidos e Israel lanzaron un devastador ataque contra instalaciones nucleares iraníes, desatando una tormenta de represalias que amenaza con arrastrar a la región —y al mundo— al borde de una conflagración mayor. Entre advertencias de la ONU, misiles cruzando el cielo y ciudades en vilo, la diplomacia lucha por abrirse paso en un escenario que se oscurece a cada hora.
La escalada entre Israel e Irán, con la implicación directa de Estados Unidos, marca un punto de inflexión peligroso para la estabilidad global.
La región del Golfo Pérsico vive horas de máxima tensión tras las explosiones registradas en Doha, capital de Catar, como consecuencia de un ataque con misiles iraníes dirigido a bases estadounidenses.
Durante los últimos doce días, el mundo ha sido testigo de un conflicto sin precedentes entre Irán, Israel y Estados Unidos, con consecuencias que podrían haber desencadenado una conflagración regional de dimensiones catastróficas.